“Literatura, libros, libreros, lectores, librerías: FELISA es este hermoso conjunto, cinco eles para aprender la vida.
Libros que esperan,
Lectores que acarician libros,
Literatura que también recibe el nombre de escritores porque son ellas y ellos quienes la construyen y preservan,
Librerías con nombres sonoros,
Libreros que van y vienen, cruzan la plaza y Santander conscientes de que manejan el pan que alimenta a la sociedad.
De los libreros fue el momento resumen de la Feria, o tal vez de las librerías, o tal vez de los lectores, o tal vez de la literatura: había hablado Marta Sanz, sonaban los ecos de los poemas que leyó con voz de medio día, poemas bellos, amorosos, irónicos, de esos que se clavan y duelen un poquito, como las inyecciones que salvan, estábamos saboreando esas palabras cuando el director de la feria emergió y pidió un aplauso para los libreros. Entonces la emoción se concretó en palmas, los lectores que habían seguido las intervenciones sin que el sol los moviera giraron el cuerpo, miraron a la derecha primero, aplaudiendo, y vieron que los libros también aplaudían, siguieron mirando al fondo, un poco más, ahora a la izquierda, hasta llegar al palco, de todas las casetas con nombres de librerías salían aplausos y había miradas expectantes de hombres y de mujeres que recibían el saludo de otros hombres y mujeres que estaban en la plaza porque los libros les habían llamado, porque la literatura tiene quien le escriba. Fueron unos instantes, fue eterno. Aplaudirnos mutuamente debería ser un destino. Aplaudir a quien organiza ferias como FELISA, aplaudir a las librerías cántabras, aplaudir a los lectores, a los escritores, aplaudir el don maravilloso que es leer y sentir en uno mismo la vida de otros. Aplaudir es decirlo todo.
FELISA es un gran acontecimiento. Con su sol y con su lluvia, con expectativas y derroche de afectos. El mejor Santander detenido en el tiempo para reencontrarse en la creación literaria. Qué suerte haber pasado por esa plaza disfrutando de las cinco eles gloriosas que son un universo cierto y capaz. Recuerden: Literatura, libros, lectores, libreros, librerías. Con la variante femenina que tanto añade: literatura, libros, lectoras, libreras, librerías. Benditas sean estas cinco eles de vida”.
